Por Waldo Mendiluza
Nueva York, 21 sep (PL) La implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible tiene en la evasión fiscal uno de sus principales enemigos, advirtió hoy aquí el economista José Antonio Ocampo.
El líder de la Comisión Independiente para la Reforma de la Fiscalidad Corporativa Internacional (Icrict, por sus siglas en inglés) recordó en entrevista con Prensa Latina que para materializar la agenda establecida por las Naciones Unidas en septiembre de 2015 los países necesitan cuantiosos recursos.
Hablamos de una cantidad considerable, y la mayor parte de esos recursos deben venir de las propias naciones, por tanto, la tributación jugará un papel clave en el éxito o el fracaso del cumplimiento de los 17 objetivos de desarrollo, advirtió el ex secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
De acuerdo con Ocampo, quien también fue secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Económicos y Sociales, los países del Sur sufren un particular impacto por fenómenos como los paraísos fiscales.
Son diversas las estimaciones de cuánto dinero pierden los Estados en desarrollo por el tema de la evasión de impuestos, cifra que pudiera llegar hasta los 250 mil millones de dólares anuales, precisó el experto colombiano.
Para el presidente de la Icrict, una organización creada en 2015 para promover reformas en el sistema tributario global, urge fortalecer la cooperación internacional en este tema, en aras de enfrentar uno de los mayores desafíos para la financiación al desarrollo.
Hace dos años, los 193 Estados miembros de la ONU acordaron la Agenda 2030, que incluye entre sus metas la erradicación de la pobreza extrema y del hambre, la reducción de las desigualdades, el acceso universal al agua, la salud y la educación, el empoderamiento de la mujer y el progreso inclusivo en armonía con la naturaleza.
Nadie duda que la agenda constituya una plataforma ambiciosa y sin precedentes en cuanto a la búsqueda de la equidad y la justicia social en el planeta.
Sin embargo, su implementación está amenazada por la carencia de un pacto fiscal global que ponga fin a los abusos de las corporaciones que evaden impuestos y esconden sus cuantiosas ganancias en los paraísos fiscales.
Ocampo opinó que la comunidad internacional debe crear en las Naciones Unidas y otros espacios multilaterales los mecanismos garantes de una cooperación que potencie la capacidad de establecer impuestos redistributivos, como los impuestos sobre la renta.
En el contexto del debate de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, que se celebra aquí del 19 al 25 de septiembre, la Icrict realizó un foro para abordar el problema de la evasión fiscal, organizado en coordinación con Ecuador y Tanzania, dos de los países más activos en la búsqueda de soluciones.