El 2021 fue el año con mayor número de fallecimientos de personas migrantes registrados en las Américas desde el año 2014, en el que inició el Proyecto Migrantes Desaparecidos, advierte el informe anual. De diciembre a enero de 2021 en las Américas se registraron 1,238 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes, de los cuales 596 sucedieron en América del Norte, 324 en América central, 180 en el Caribe y 148 en América del Sur. Durante el año 2020, se registraron 798 fallecimientos en las Américas, desglosados en América del Norte (371), América central (165), El Caribe (163) y América del Sur (99). Estos fallecimientos en su mayoría están relacionados a la falta de opciones para una movilidad segura y regular, que aumenta la probabilidad de que las personas migrantes opten por vías de migración irregulares que ponen en riesgo su vida.
FRONTERA ESTADOS UNIDOS-MÉXICO
Durante el año 2021, en estas dos regiones se registraron 920 vidas perdidas de personas migrantes y en el año 2020 se registraron 536. Esto representa un aumento del 72 por ciento. En el transcurso del 2019 en ambas regiones se registraron 655 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes.
En América del Norte durante el año 2021, 276 muertes correspondieron a hombres, 76 a mujeres, 8 a niñas, niños y adolescentes y no fue posible determinar el sexo ni edad de 236 personas. En América central 20 de los fallecimientos registrados correspondieron a mujeres, 120 a hombres, 10 correspondieron a niños, niñas y adolescentes y no fue posible determinar el sexo ni edad de 17 personas.
FRONTERA ESTADOS UNIDOS-MÉXICO
El 2021 ha sido el año más mortífero en esta frontera desde que el Proyecto Migrantes Desaparecidos comenzó a recolectar datos. En 2021, se registraron 728 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes, 53 por ciento más que en el año 2020, cuando se registraron 476 y 39 por ciento más que en el año 2019, cuando se registraron 524. Acorde a los datos del Proyecto, esta es la tercera región fronteriza más mortífera en el mundo después del Mediterráneo y del Desierto del Sáhara.
TAPÓN DEL DARIÉN
Acorde a datos del Proyecto Migrantes Desaparecidos, durante el año 2021, en el Tapón del Darién se registraron 51 vidas perdidas de personas migrantes, en el año 2020 se registraron 26 y en el año 2019 se registraron 40. Los informes anecdóticos indican que gran cantidad de personas migrantes fallecen en el Tapón del Darién y sus restos nunca son recuperados, por lo que las cifras presentadas probablemente reflejan solo una pequeña fracción del verdadero número de vidas perdidas. Esto es debido a los desafíos que implica la recopilación de estos datos, como se verá más adelante en la sección de desafíos regionales para la recopilación de datos.
FALLECIMIENTOS Y DESAPARICIONES EN EL CARIBE
Las islas del Caribe reciben un número significativo de migrantes y refugiados, quienes utilizan rutas marítimas y terrestres altamente peligrosas. Esta dinámica migratoria aumenta la vulnerabilidad de las personas migrantes a sufrir explotación, trata de personas y otras violaciones de derechos humanos y las hace propensas a perder la vida durante el tránsito migratorio. A continuación, se analizan detalladamente las rutas conocidas más peligrosas, entre ellas las rutas marítimas hacia diversos lugares en los Estados Unidos de América, los viajes marítimos que se originan en Venezuela y el trayecto marítimo de Haití a la República Dominicana.
Durante el año 2021, en la región Caribe se registraron 180 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes, durante el año 2020 se registraron 163 y en el año 2019 se registraron 160.
Durante el año 2021, 44 de los fallecimientos registrados correspondieron a hombres, 22 a mujeres y 3 a niños, niñas y adolescentes, además no fue posible determinar el sexo ni edad de 111 personas. .Abajo se muestran las principales nacionalidades de las personas migrantes fallecidas en rutas del Caribe, de acuerdo al Proyecto Migrantes Desaparecidos.
RUTA DE LA REPÚBLICA DOMINICANA A PUERTO RICO
Durante el año 2021 se registraron 65 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes, en el año 2020 se registraron 58 y en el año 2019 se registraron 6. Esta es una ruta muy peligrosa debido a los riesgos que presentan las rutas marítimas, en cuanto a las condiciones ambientales extremas en altamar y a las embarcaciones innavegables que se utilizan.
Desde el año 2020, el Proyecto Migrantes Desaparecidos intensificó el monitoreo, la recopilación de datos y la articulación con oficinas de la OIM de esta región, incluidas las oficinas nacionales de República Dominicana, Bahamas y Guyana para mejorar la documentación de muertes de personas migrantes. Gracias a estos esfuerzos hubo un aumento de incidentes verificados y registrados durante los años 2020 y 2021. Los denominados “naufragios Yolas” son en muchas ocasiones naufragios invisibles, es decir que suceden sin que las autoridades ni los medios de comunicación tengan conocimiento de estos incidentes.
RUTA DEL CARIBE A ESTADOS UNIDOS
Durante el año 2021 en esta ruta se registraron 67 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes. Esto representa un aumento del 272 por ciento, comparado con las 18 muertes registradas durante el año 2020. Durante el 2021, se observó un incremento del tránsito migratorio en esta ruta, probablemente relacionado con los efectos de la pandemia de COVID-19 en países del Caribe y América del Sur.
RUTAS DE VENEZUELA AL CARIBE
A raíz de la crisis económica venezolana muchas personas han salido de su país a través de rutas irregulares, incluidos los peligrosos cruces de ultramar a naciones del Caribe como Aruba, Curazao, República Dominicana y Trinidad y Tobago. Durante el año 2021, en la ruta de Venezuela al Caribe se registraron 27 muertes y desapariciones de personas migrantes. Durante el año 2020 se registraron 33 y en el año 2019 se registraron 84. De acuerdo con reportes anecdóticos, muchas personas migrantes, específicamente venezolanas, prefirieren utilizar la ruta terrestre que atraviesa el Tapón del Darién en lugar de dirigirse a naciones caribeñas debido a la peligrosidad de utilizar las rutas marítimas, lo que podría explicar la disminución de los fallecimientos ocurridos durante el año 2021, frente a los del año 2020 y 2019.
En las rutas migratorias del Caribe, el Proyecto ha documentado el segundo número más alto de muertes y desapariciones de personas migrantes en la región, después de la frontera entre los Estados Unidos de América y México, documentándose la muerte de 800 personas entre 2014 y 2020. La principal causa de defunción en el Caribe es el ahogamiento en naufragios a lo largo de las múltiples rutas marítimas dentro, hacia y desde la región. Debido a la dificultad de monitorear rutas marítimas y las probabilidades de que muchas embarcaciones desaparezcan sin dejar rastro, es muy probable que el número de muertes ocurridas durante la migración en el Caribe sea mucho mayor de lo que se ha documentado actualmente.
CONCLUSIONES
Los 1,238 fallecimientos y desapariciones de personas migrantes registrados en las Américas durante el año 2021 están conectados con la falta de opciones para una movilidad segura y regular, que aumenta la probabilidad de que las personas migrantes opten por vías de migración irregulares que ponen en riesgo su integridad y su vida.
El año 2021 es en el que se han registrado mayor número de muertes en las Américas desde el inicio del Proyecto Migrantes Desaparecidos. Entre las principales causas directas de estas muertes están el ahogamiento, los accidentes de tránsito, la violencia y las condiciones ambientales extremas. Aunque también se registraron múltiples incidentes que involucraron crímenes de odio o que su motivación fue la intolerancia y la xenofobia.
No se debe perder de vista que, en las Américas, son relativamente pocas las agencias gubernamentales que se encargan de recopilar y sistematizar datos sobre fallecimientos de personas migrantes de una manera rigurosa y apegada a criterios de selección basados en evidencia. La meta 10.7.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) apunta a generar datos de calidad para una mejor documentación de los fallecimientos y desapariciones de personas migrantes durante el tránsito migratorio.
Se debe de hacer una amplia evaluación y modificación de aquellas políticas migratorias que no toman en cuenta la evidencia disponible acerca de los fallecimientos y desapariciones de personas migrantes, como las políticas migratorias que apuntan a un enfoque punitivo o criminalizador de la migración. La implementación de estas políticas provoca muertes y desapariciones durante el tránsito migratorio, al fomentar el uso de rutas de migración irregular por regiones de alto riesgo para evadir la detección por parte de autoridades.
Se debe mejorar la articulación entre actores clave en las Américas como las organizaciones de la sociedad civil, institutos de investigación, agencias de cooperación, organizaciones intergubernamentales y agencias de Naciones Unidas para posicionar en la agenda política y pública el tema de las personas migrantes que fallecen o desparecen durante el tránsito migratorio, generar este tipo de esfuerzos permitirá recopilar datos de calidad de fuentes fidedignas, para tener una mejor dimensión de las vidas perdidas durante la migración.
Estos esfuerzos internacionales coordinados para salvar vidas deben continuar, como lo indica el Objetivo 8 del Pacto Mundial para la Migración, Segura, Ordenada y Regular, específicamente el monitoreo de las diferentes regiones y rutas expuestas en este reporte, para tener un panorama claro y actualizado y poder informar a actores gubernamentales y de la sociedad civil acerca de los riesgos que la migración irregular presenta para las personas migrantes.