La Asamblea General de la ONU aprobó tal designación como reconocimiento a la importancia del turismo internacional y, en particular, debido a su aporte a la economía y al entendimiento de los países.
Tal apreciación antepone la industria recreativa a flagelos como las guerras, muchas de las cuales se generan debido a los intereses económicos y materiales, pero también por incomprensión entre las diferentes culturas.
El secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Taleb Rifai, está convencido de que esos propósitos son posibles y estimula tales iniciativas.
Esta decisión se suma al reconocimiento por parte de los líderes mundiales en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20), el que, bien concebido y bien gestionado, puede contribuir a crear empleo y generar oportunidades comerciales.
EL 2016, UN BUEN AÑO
El más reciente reporte del Barómetro de la OMT señaló que el turismo mundial aumentó cuatro por ciento de enero a septiembre de 2016, lo que certifica la espiral creciente de la industria de los viajes.
De acuerdo con el reporte, tras empezar el año con fuerza, el crecimiento se ralentizó en el segundo trimestre, para repuntar en el tercero.
El Barómetro agregó que la demanda de turismo internacional creció a un ritmo más moderado respecto al mismo período de 2015, pero estamos hablando de cifras millonarias.
Un total de 956 millones de turistas viajaron a destinos internacionales de enero a septiembre de 2016, es decir, 34 millones más respecto al mismo periodo de 2015.
En Europa, las llegadas internacionales treparon dos por ciento en el mismo periodo que recoge el informe, al tiempo que el crecimiento fue sólido en la mayoría de los destinos.
Los aumentos de dos dígitos en destinos importantes como España, Hungría, Portugal e Irlanda se vieron contrarrestados por descensos registrados en Francia, Bélgica y Turquía.
La región de Asia y el Pacífico lideró el alza hasta septiembre pasado, con aumento del nueve por ciento en las llegadas de extranjeros, mientras que en América se incrementó el cuatro por ciento.
Referente a África, los destinos subsaharianos rebrotaron con fuerza a lo largo del año, mientras que el norte del continente despuntó en el tercer trimestre. La llegada de viajeros internacionales a Oriente Medio registró un descenso del seis por ciento, aunque los resultados varían de un destino en el nivel regional.
Las perspectivas para el último trimestre de 2016 son optimistas, ya que especialistas de la OMT manifiestan su confianza en la evolución del flujo, sobre todo en África, América, Asia y la región del Pacífico.
De ahí que la decisión de designar 2017 como Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo llega en un momento importante, ya que la comunidad internacional tiene en la mira la nueva Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados por la Asamblea General de Naciones Unidas.
El turismo figura en las metas de tres de los ODS. El objetivo 8 se relaciona con la promoción del crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible.
Además, tiene en cuenta el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos. El objetivo 12 prevé el consumo y la producción sostenibles.
El 14 se vincula a la conservación y utilización de los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
Sobre el incremento, el propio Rifai considera que la primera mitad del año suele concentrar el 46 por ciento de todos los movimientos turísticos del ejercicio completo.
Anuncia asimismo que sus previsiones para el segundo semestre son también positivas, lo que en definitiva coloca el 2016 en buena posición y en perspectivas saludables para el nuevo año.
Por tanto, son destacables algunos destinos, cuando China se mantiene como el primer mercado emisor en el mundo, con un alza del 20 por ciento, seguida por Estados Unidos, con ocho por ciento.
Otros buenos comportamientos son el de España, donde los viajes emprendidos por sus turistas se incrementaron en 20 por ciento; Noruega, con el 11 por ciento; y Australia, con el 10 por ciento.
De esa suerte, el turismo mundial crece por año, pese a problemas diversos como inestabilidades políticas y militares, dificultades económicas en muchas regiones y territorios, y fenómenos meteorológicos.
Tal fortaleza de este sector certifica sus potencialidades y refuerza criterios de entendidos en el caso de facilitar las cosas para las comunidades y permitir una relación llevadera entre los seres humanos, en cultura, tradición y conocimiento general.
*Periodista de la Redacción de Economía de Prensa Latina.
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